Transición justa: qué es y qué supone para las empresas asturianas

Siendo Asturias una de las regiones más afectadas por el proceso de descarbonización, también destaca por las considerables oportunidades que le brinda la Transición Energética.

El cambio climático es una realidad que exige tomar medidas urgentes con el fin de salvar vidas y medios de subsistencia. Las emisiones mundiales de dióxido de carbono (CO2) han aumentado casi un 50% desde 1990. Reducirlas es ahora el foco central de todos los planes de acción por el clima que se están llevando a cabo en el mundo. Entre ellos, está la transición justa, un marco propuesto por la Organización Internacional del Trabajo y la Convención de Naciones Unidas contra el cambio climático, que persigue maximizar los beneficios en la actividad y el empleo a la vez que se minimiza el impacto climático. Ahora bien, ¿qué es la transición justa y qué supone para las empresas asturianas?

En primer lugar, hay que tener en cuenta el ámbito nacional. El Gobierno de España aprobó en 2019 el Marco Estratégico de Energía y Clima, que contempla varias medidas para facilitar el cambio hacia un modelo económico sostenible, que ponga freno al cambio climático, y competitivo. Y, en segundo lugar, la Estrategia de Transición Justa de Asturias, que establece también las directrices para la transformación energética de la región en los próximos años.

2030 y 2050, años claves en la Transición Justa

El plan nacional se estructura en tres elementos: el anteproyecto de Ley de Cambio Climático, el borrador del Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC) y la Estrategia de Transición Justa. De ellos, hay dos que afectan de manera significativa a las empresas asturianas y españolas.

  • El anteproyecto de Ley de Cambio Climático plantea que el sistema eléctrico español debe evolucionar para ser 100% renovable y neutro en emisiones de gases de efecto invernadero en 2050.
  • El borrador del PNIEC recoge una reducción del 23% de las emisiones de gases de efecto invernadero en 2030, tomando como referencia los niveles de 1990. También contempla alcanzar en este mismo año un 42% del consumo de energías renovables sobre el consumo de la energía final.

Objetivos y oportunidades de la Transición Justa en Asturias

Asturias, por su parte, ha adaptado este plan nacional a su particular contexto: cuenta con un peso de la actividad industrial superior al 20% del PIB regional, con una importante representación de la industria electrointensiva. Para ello, se mencionan una serie de objetivos y oportunidades, surgidas a la luz de la Transición Energética:

  • Descarbonizar el modelo energético regional.

    El objetivo es asegurar la competitividad de la economía regional, reduciendo su impacto medioambiental. Entre los proyectos más relevantes en relación con este objetivo se encuentran los promovidos por el Grupo Hunosa, dentro del campo de las renovables y en particular de la biomasa forestal.

  • Nuevo modelo de consumo energético.

    La finalidad es alcanzar en el año 2030 un ahorro del 9,1% en el consumo de energía final con respecto al del año 2017 y aumentar hasta el 12,6% el consumo final con renovables.

  • Potenciar la competitividad de las empresas asturianas.

    Es necesario evaluar el impacto de la transición energética en las empresas asturianas y en el empleo. Para ello, la estrategia regional incide en la importancia del cumplimiento del marco propuesto por la Organización Internacional del Trabajo.

  • Fortalecer el tejido industrial apostando por la I+D.

    Se llevará a cabo una importante inversión en I+D en Asturias, tanto privada como público-privada, para adaptarse al nuevo escenario energético. Lo que contribuirá a reforzar el tejido industrial.

  • Generar empleo y reducir desigualdades.

    La estrategia asturiana establece el objetivo de conseguir, gracias a la transición energética, una generación neta de empleo en la región de más de 6.300 empleos en 2030.

El papel de Hunosa en la Transición Justa de Asturias

En este nuevo contexto energético, los proyectos impulsados tanto por el Grupo Hunosa como por Hunosa Empresas están llamados a jugar un papel clave en el proceso de la Transición Justa de Asturias. Proyectos como la transformación de la central de La Pereda, el impulso del sector de la biomasa en Asturias, a través del Polo de la Biomasa, el fomento de la fotovoltaica o los ejemplos de economía circular con la geotermia de los pozos Barredo y Fondón, entre otros, contribuirán al desarrollo sostenible de la Cuenca central asturiana y a la generación de empleo.

Asimismo, Hunosa Empresas continúa trabajando en el desarrollo de nuevos modelos de reactivación y de iniciativas que contribuyan al desarrollo socieconómico de las cuencas, colaborando con haciéndolo junto a diferentes instituciones y entidades, conformando una activa comunidad de negocios.

Si tienes en mente un proyecto empresarial sostenible y generador de riqueza en Asturias, ¡queremos conocerte! Cuéntanos tu idea y te ayudaremos a ponerlo en marcha.