El encanto de estos conocidos versos de Antonio Machado, resonó con fuerza en la bienvenida de la Segunda Edición del Encuentro Anual de Empresas, celebrada el pasado 28 de septiembre, en el Ecomuseo de Samuño (Langreo), dentro del marco del V Foro de Promoción Empresarial de HUNOSA EMPRESAS.
Dando sentido a la jornada, esta poética alegoría al camino sirvió también como punto de partida de un viaje por la historia viva del carbón asturiano, a través del bello Valle de Samuño, un espacio natural protegido, que ofrece un inigualable testimonio de la era dorada de la minería en la Cuenca del Nalón, ostentando la distinción Bien de Interés Cultural desde 2013.

Resulta difícil elegir un escenario que atesore un legado industrial tan singular y que encarne unos valores tan genuinamente enraizados en el carbón como éste. Por ende, supone un lugar ideal para seguir construyendo comunidad, en torno al colectivo formado por nuestra familia de empresas financiadas y de proyectos en estudio, con el objetivo común de favorecer el desarrollo de las comarcas mineras del área central de Asturias.

Y es que el compromiso de HUNOSA EMPRESAS con este territorio va más allá de un mero apoyo financiero o de un simple respaldo empresarial, ya que trata también de fortalecer la colaboración y de fomentar la creación de un sólido tejido empresarial, que facilite la generación de un dinámico ecosistema de negocios alrededor de actividades innovadoras, sostenibles y de valor añadido.

Por otra parte, contando en esta ocasión con una nutrida representación de participantes, cuya presencia y entusiasmo aprovechamos para agradecer, comenzamos nuestra aventura en la Estación de El Cadavío, subiéndonos a un tren que nos acercó a la orilla del río Samuño y nos acabó adentrando en las profundidades de la tierra. Entonces recorrimos el trayecto ferroviario más largo de España a lo largo de una auténtica galería minera, consistiendo ésta en una vía cavada con esfuerzo y determinación por mineros que dejaron allí no sólo su impronta, sino que en algunos casos también su vida.
Posteriormente llegamos al Pozo San Luis, punto de destino y emplazamiento de singular valor patrimonial, donde la industria se fusiona con el arte, constituyendo un magnífico enclave para compartir experiencias, trabajar el potencial personal y forjar fructíferos lazos de colaboración que nos permitan afrontar conjuntamente los retos venideros y aprovechar con éxito las oportunidades por venir.

Finalmente, tras este encuentro, HUNOSA EMPRESAS desea continuar con esta iniciativa y quiere seguir formando parte del viaje cotidiano de todas aquellas empresas que continúen apostando por un entorno de tan amplia tradición industrial y posibilidades como el de las cuencas mineras del centro de la región, con el firme convencimiento de que caminando juntos podremos construir un mejor futuro.